DOLOR Y COMPASIÓN ANTE LAS NECESIDADES DE LA HUMANIDAD

Mons. Aranguren  recuerda a quienes han sufrido a causa de las lluvias y las crecidas de los ríos en Cuba

HOLGUÍN, Cuba.- Después de las intensas lluvias de la semana del 6 de junio que han causado derrumbes, inundaciones y pérdidas de cosechas, el obispo de la Diócesis de Holguín ha hecho una invitación a sentir compasión y solidarizarse con tanto dolor, como hizo Jesús ante la multitud que le seguía que estaba cansada, triste y  andaba “como ovejas sin pastor”.

A través de las ondas radiales de las emisoras provinciales de Holguín y Las Tunas, el nuevo programa dominical de la Diócesis recuerda que este domingo se celebra el Día de los Padres en el marco de la Jornada de la Familia. En Cuba, la Iglesia ha unificado en cuatro domingos el recuerdo de las cuatro experiencias familiares: la madre, el padre, los abuelos y los hermanos. 

A lo largo de media hora de programa los conductores ofrecen una catequesis sobre la familia  como “la primera Iglesia en donde experimentamos el amor de Dios”.

También recuerdan que el pasado viernes 16 de junio la Iglesia celebraba la Festividad del Sagrado Corazón de Jesús, una devoción muy arraigada en Cuba. 

Al dirigirse a los radioescuchas, Mons. Aranguren  envía saludo a quienes han sufrido por las lluvias y la crecida de los ríos. De ello también se ha hecho eco el Sitio Web Vatican News que ha recogido el llamado de Caritas Cuba.

El obispo comenta que la parte oriental  ha sido muy afectada y reflexiona sobre las imágenes en Jobabo,  Colombia, Pozo Prieto en Puerto Padre, Cacocún, Urbano Noris, lugares en territorio diocesano

“Uno se fija en las imágenes  en la  fuerza de las corrientes, los  rostros de las personas, los calderos humeantes en fogones de leña sobre el pavimento para propiciar el alimento , las labores de los rescatistas para salvar vidas… y siente algo por dentro”, dice el obispo. Las imágenes le llevan a comentar las palabras de Jesús en el Evangelio de este domingo al contemplar a la multitud. “Sintió compasión porque estaban decaídos y desanimados como ovejas sin pastor”.

Puente derrumbado en la Presa Mayari, territorio diocesano

Esta actitud de Jesús, que sintió compasión, es para el obispo un llamado a cuestionarse: “¿Qué siento hoy ante las necesidades de la humanidad? ¿No me preocupa ver tanta gente cansada, triste?” Y el obispo recuerda las palabras de Jesús a sus discípulos: “la cosecha es mucha y los trabajadores son pocos”. 

Para Mons. Aranguren, los trabajadores no son solo los sacerdotes y las religiosas, sino que Jesús se dirige a cada discípulo “a cada uno les invita a cosechar. La mies está madura. La humanidad está lista para aceptar el evangelio”.

Es la humanidad de hoy,  con sus contradicciones y miserias a la que hay que dirigirse, señala. Mons. Aranguren pide guardar silencio e interiorizar la pasión de Jesús por la humanidad, su plan de amor, para hacer, con la ayuda del Espíritu, la obra que Jesús quiere que realicemos hoy”.

Puedes escuchar todo el programa en este enlace:

HOLGUIN CATÓLICO