
El obispo de Holguín ora al Espíritu Santo y recuerda a las víctimas del accidente aéreo de hace 6 años en La Habana
HOLGUÍN, Cuba.- En la solemnidad de Pentecostés el obispo de Holguín ha implorado la ayuda del Espíritu Santo por las ondas radiales.
” ¡Ven, en primer lugar, a mi vida, a mi corazón, dame tu aliento, sopla sobre mí!”, ha orado Mons. Emilio Aranguren Echeverría.

“Ven a mi hogar, a los míos, únenos en el amor, como familia que somos” ha seguido orando. “Libéranos del miedo que nos retrae, de la mediocridad que nos encierra en el conformismo del que dice: “da lo mismo, qué más da”, reconforta nuestra falta de fe en tu fuerza creadora, capaz de hacer los imposible”.

Holguineros y Tuneros han podido escuchar a Mons. Aranguren a través de las emisoras provinciales de Holguín y Las Tunas. El obispo ha felicitado a la comunidad de Tacajó que tiene al Espíritu Santo como patrón y también a quienes en este día reciben el Sacramento de la Confirmación en las Parroquias de Gibara y Ciudad Jardín. Para el obispo, Pentecostés es un día de renovación interior.

En sus comentarios Mons. Aranguren ha recordado que se cumplen seis años desde que 110 personas -casi todos holguineros- fallecieron en el accidente aéreo ocurrido al despegar el avión cerca del aeropuerto en La Habana. Nombró a las 10 parejas de la Iglesia de El Nazareno y pidió fortaleza física y espiritual para la sobreviviente Mailén Díaz Almaguer.
El obispo ha recitado la Secuencia del Espíritu Santo que la Iglesia propone para rezar en Pentecostés.
“Ven Espíritu divino, manda tu luz desde el cielo. Tregua en el duro trabajo, brisa en las horas de fuego. Gozo que enjuga las lágrimas y reconforta en los duelos. Entra hasta el fondo del alma. Mira el vacío del alma si tú le faltas por dentro. Guía al que tuerce el sendero. Por tu bondad y tu gracia, dale al esfuerzo su mérito. Salva al que busca salvarse y danos tu gozo eterno. Amén.
Esto y más lo pueden escuchar aquí mismo.
HOLGUÍN CATÓLICO