
Son ya 45 los graduados de este curso de tres años de la Diócesis de Holguín
HOLGUÍN, Cuba.- Después de completados tres años de formación 17 estudiantes del Tercer Curso Bíblico Teológico, (CBT) para laicos de la Diócesis de Holguín recibieron, el 19 de noviembre, el diploma de graduación durante un acto en el Centro Diocesano de Formación Laical San Arnoldo Janssen.
Presidieron el acto el obispo de Holguín, Mons. Emilio Aranguren Echeverría, la teóloga Carmen Aparicio Valls y la profesora Araceli Cantero Guibert quienes han impartido las clases y acompañado a los estudiantes en este proceso de formación.

“Estamos aquí porque queremos corresponder a lo que Dios quiere de cada uno de nosotros… Él espera que nosotros correspondamos con confianza, generosidad y entrega” les dijo Mons. Aranguren.
El obispo recordó que los tres cursos bíblico-teológicos que se han completado en la Diócesis durante once años, tienen un único objetivo: “favorecer el crecimiento humano, espiritual, social y eclesial de quienes, como laicos, han participado“.

Este curso número 3 se vió afectado por la pandemia del Covid19 y por ello el acto de graduación tuvo lugar dos años después de haberse concluido las clases.
Para Mons. Aranguren, gracias al CBT, “en nuestra Diócesis se ha incrementado el número de quienes animan, participan y representan el camino sinodal”.

Hasta el momento son 45 laicos los que han participado en estos cursos y permanecen en Cuba. Pertenecen a 18 de las 32 parroquias de la Diócesis y 40 de estos prestan servicios eclesiales en sus comunidades.
El mismo día por la mañana los graduandos mantuvieron un intercambio con los graduados de los dos cursos anteriores y, además de conocerse, todos compartieron sobre el fruto que había tenido el curso en sus vidas.
El obispo les dijo que como pastor diocesano espera “seguir contando con ustedes para esta nueva etapa que estamos llamados a afrontar para poner en práctica el deseo expresado por el Papa Francisco en su Exhortación “Predicar el Evangelio”. Un deseo que para el Papa se expresa en: ¨menos estructuras, más sentido de equipo, disposición de escucha y generosidad para darle a nuestro pueblo, la alegría del Evangelio, la vida de Jesús en abundancia y el testimonio del amor gratuito y misericordioso que ejemplificó el Buen Samaritano”.

La profesora Aparicio resumió los contenidos del curso y el proceso formativo que se ha seguido con encuentros presenciales y con tareas, acercando a los estudiantes a la Palabra de Dios y el estudio de la Sagrada Escritura, así como el trabajo sobre los recientes documentos de la Iglesia a partir del Concilio Vaticano Segundo, de los recientes Papas y también de la Iglesia cubana.
“Creo que puedo decir que el curso se ha transformado en compromiso” señaló la profesora. Y recordó que ¨nos estamos preparando como Iglesia a un sínodo que estudiara la sinodalidad” que es una cualidad, un modo de ser y de estar: caminando juntos, con otros, viviendo la comunión, el diálogo, el discernimiento¨.
No olvidó expresar la gratitud de todos hacia la Diócesis y a quienes apoyaron la coordinación desde las Vicarías: Lourdes Escalona en Holguín,Yordanka Portillo en Las Tunas y Magalis Álvarez en la zona minera.

La profesora Cantero explicó que a lo largo del curso se ha tratado de integrar una fe razonada y apoyada en el conocimiento de la Biblia y de la doctrina con el crecimiento humano y espiritual . Invitó a los estudiantes a convertir en vida el Decálogo del Laico Católico Cubano.

Después de ofrecer algunos testimonios sobre los contenidos del curso y lo aprendido y de presentar el título de su trabajo de tesis, recibieron un diploma los estudiantes que habían completado sus tareas y entregado el trabajo final. Al acto de graduación siguió un brindis y muchos saludos y fotografías.

Durante el acto, se recordó a Ricardo Sors Capote quien durante años, y como director del Centro Janssen “nos ha acogido y hoy está en la casa del Padre”.
HOLGUÍN CATÓLICO